A los profesionales del sector siempre nos ha extrañado por qué una gran mayoría de la gente que dispone de aire acondicionado con bomba de calor en su casa, cuando llega el invierno el sistema de calefacción que emplean es el convencional, es decir, el de los radiadores. Y es que, siempre hemos pensado que el gasto eléctrico de estos aparatos es mayor que el de una calefacción convencional, como puede ser la caldera de gas que la mayoría de la gente tenemos en nuestras casas. Pero, nada más lejos de la realidad…
Aprovechando que llega el invierno y que alberga horrores, vamos a analizar qué sistema es mejor; ¿bomba de calor o radiadores? ¿Comenzamos?
¿Cómo funciona un aire acondicionado con bomba de calor?
Para que podamos comprender las diferencias entre un sistema de calefacción u otro, es necesario primero saber cómo funciona un aparato de aire acondicionado con bomba de calor. Este es un aparato que nos permite realizar una transferencia de energía en forma de calor. Es decir, lo coge de un ambiente exterior y lo emplea en calefactar y calentar el agua de nuestra casa.
Para ello, absorbe el aire a temperatura exterior y lo hace interactuar con un fluido que, gracias a un compresor que le proporciona un aumento de temperatura, lo distribuye por los conductos calentando nuestro hogar.
Aunque es cierto que estos aparatos funcionan gracias a la corriente eléctrica, lo cierto es que presentan una gran eficiencia energética, llegando incluso los más eficientes a ser capaces de suministrar 4 kWh térmicos por cada 1 kWh eléctrico consumido. Esta proporción se la conoce técnicamente como SCOP (Seasonal Coefficient of Performance), así que si tienes una instalación de aire acondicionado con bomba de calor, fíjate en este coeficiente porque indica la eficiencia que tiene tu sistema.
¿Y cuánto consume una calefacción por radiadores?
En cuanto a los sistemas de calefacción por emisores o radiadores, los eléctricos son los más caros, ya que presentan un SCOP de 1; por cada kWh que tenga cada emisor, consumirá lo mismo en electricidad, con lo que de entrada ya es como 3 o 4 veces más caro que un aire acondicionado con bomba de calor.
Pero, ¿qué ocurre con las calderas de gas? En estos casos y para establecer una comparación justa, debemos considerar tanto el rendimiento de la propia máquina como la naturaleza de la energía que emplea para su funcionamiento.
La energía que llega a la caldera de nuestras casas ha sufrido una conversión que la pasa de primaria a final gracias a las centrales térmicas habilitadas para ello. A esta transformación sufrida, hay que sumarle el transporte por los conductos que hacen que llegue a nuestros domicilios. Todo este sistema se caracteriza por unas pérdidas energéticas que disminuyen su eficiencia energética notablemente.
Mientras un aparato de aire acondicionado con bomba de calor presenta un rendimiento térmico de 4, la caldera de gas más eficiente (la de condensación) no suele pasar del 1,09, por lo que un sistema de bomba de calor es el más eficiente en la actualidad sin ningún tipo de dudas.
Otros beneficios de una instalación de aire acondicionado con bomba de calor
Si piensas adquirir un aire acondicionado en Benidorm con bomba de calor, o en el resto de España, y aún no estás convencido de su gran eficiencia energética con respecto a otros sistemas de calefacción, deja que te comentemos otro tipo de ventajas que tienen:
- En primer lugar, el mismo sistema te servirá para refrigerar y calentar tu casa.
- No generan emisiones al medioambiente: Las bombas de calor no generan dióxido de carbono en su funcionamiento, por lo que contribuyen a preservar nuestro medioambiente.
- Pueden funcionar por energías renovables: Al ser máquinas eléctricas, pueden ser alimentadas mediante energías limpias y renovables como la solar, la geotérmica o mediante aerotermia.
- Es un sistema cómodo, limpio y seguro: La bomba de calor no produce cenizas ni humos que ensucien las paredes. Además, al no utilizar combustibles tóxicos ni inflamables, es uno de los sistemas más seguros de calefacción existentes.
- Vida útil: Las bombas de calor presentan vidas útiles de 15 a 25 años, muy superior a las calderas convencionales de gas o gasóleo, que suelen ser de 8 a 12 años.
- Necesitan poco mantenimiento: Mientras que lo recomendado en el mantenimiento de calefacción por radiadores de gas es la visita de un técnico cada 12 meses para un funcionamiento eficiente, los sistemas por bomba de calor no requieren mantenimientos profesionales, son muy fáciles y rápidos de hacer.
Todo lo anterior hace que un aire acondicionado con bomba de calor sea cada vez más uno de los aparatos preferidos por los consumidores a la hora de calefactar sus casas. ¿Quieres eficiencia energética? Llámanos.